Si llevas tiempo ahorrando, seguro que has llegado a una conclusión potente: necesitas ir un paso más allá para conseguir que tus ahorros crezcan exponencialmente. Ahorrar está bien pero, especialmente en los tiempos que corren, es insuficiente. Y precisamente por eso está la inversión, que es la pieza que complementa al ahorro y puede hacernos subir de nivel. Hoy te hablamos sobre algunas opciones para invertir para principiantes que pueden ser de gran interés.
¿Qué supone invertir?
Parece evidente, pero quizá es lo primero que deberíamos tener claro antes de lanzarnos a la piscina.
Invertir supone destinar parte del dinero con el que contamos a la compra de activos financieros con el fin de que esto genere cierto beneficio. Por tanto, como vemos, inversión y ahorro van de la mano, y hasta podríamos decir que uno es consecuencia de otro.
¿Qué tipos de inversión existen?
Principalmente, al hablar de inversión, podemos pensar en tres tipos:
- La inversión financiera, donde hablamos de bonos o depósito en fondos de inversión.
- El segundo y cada vez más extendido, la inversión en empresa, por medio de las acciones.
- El tercero y quizá más tradicional, la inversión física, que hace referencia al dinero invertido en bienes como materias primas e inmuebles.
Opciones para invertir: ¿En qué activos financieros podemos invertir?
Al pensar en invertir, la cabeza nos lleva casi de forma inmediata a la inversión financiera, donde existen infinidad de activos posibles.
De entre todos, los más destacados son las acciones, los fondos de inversión y los depósitos bancarios, estos últimos cada vez más a la baja.
Acciones: son un tipo de renta variable que permiten de alguna forma al inversor entrar en una empresa. De esta forma, le será posible hacerse partícipe del resultado de la empresa, por medio de los dividendos. Además, el inversor también puede sacar rentabilidad al vender de nuevo las acciones, si estas han aumentado su valor.
Fondos de inversión: De las opciones más sencillas, especialmente interesante para principiantes. Es un tipo de instrumento conocido como como instrumento de gestión colectiva, que tiene como objetivo reunir el dinero de varios inversores para “aunar fuerzas”. Así, consigue hacer una buena diversificación que reduzca el riesgo de los movimientos y aumente la probabilidad de éxito.
Depósitos bancarios: En este caso, el usuario cede cierta cantidad al banco comprometiéndose a no darle uso durante un tiempo determinado. Al finalizar este tiempo, el banco ha de devolverle el dinero al inversor más los intereses pactados.