Las carteras electrónicas (e-wallets) o carteras digitales (digital wallets) son aplicaciones que te permiten realizar transacciones financieras en dispositivos móviles. Estas herramientas almacenan y guardan en un lugar seguro tus datos de pago, para que puedas usarlas con tranquilidad y no necesites llevar contigo tus tarjetas de débito o crédito. Con la información de tu cuenta o tarjetas, puedes pagar con ellas en cualquier comercio.
Las e-wallets (o digital wallets) te permiten almacenar también cupones de regalo, tarjetas de membresía o fidelidad, cupones, entradas o tickets para eventos de todo tipo, los billetes de tren/bus/avión, reservas de hotel… En este post te explicamos hasta dónde puedes llegar con las carteras digitales.
¿Cómo funcionan las e-wallets?
Las e-wallets son aplicaciones diseñadas para aprovechar las capacidades de los dispositivos móviles para mejorar el acceso a productos y servicios financieros. Las carteras digitales esencialmente eliminan la necesidad de llevar una cartera física al almacenar toda la información de pago de un consumidor de forma segura y compacta.
En esta línea, las carteras electrónicas utilizan las capacidades inalámbricas de un dispositivo móvil como Bluetooth, wifi y señales magnéticas para transmitir datos de pago de forma segura desde su dispositivo a un punto de venta diseñado para leer los datos y conectarse a través de estas señales.
Tecnologías empleadas
- Códigos QR: son códigos de barras de matriz que almacenan información. Con la cámara de tu dispositivo puedes escanearlos para iniciar el pago o acceder a un sitio web.
- Sistema NFC: es una tecnología que permite que dos dispositivos inteligentes se conecten y transfieran información mediante señales electromagnéticas. Requiere que dos dispositivos estén a aproximadamente una pulgada y media (4 centímetros) uno del otro para conectarse.
- Transmisión segura magnética (MST): es la misma tecnología que utilizan los lectores de tarjetas. Ahora los smartphones permiten utilizar este método mediante la creación de un campo encriptado que puede leer un TPV.
Con estos sistemas, la información almacenada en tu e-wallet puede trasmitirse desde tu móvil a la terminal. Después, este dispositivo se encarga de conectarse a las redes de tarjetas de crédito y los bancos para que el pago se realice con éxito.
Debido a que las criptomonedas se han abierto camino en el sistema financiero, algunas empresas como Bitpay han inventado tarjetas que le permiten pagar con ellas. Esta tarjeta convierte las criptomonedas en dólares al valor del mercado actual para que puedas realizar tus compras. Algunas digital wallets como Apple Pay o Google Pay te permiten añadir una de las tarjetas de BitPay.
Tipos de carteras digitales
Hay un gran número de e-wallets. Las más destacadas son Cash App, ApplePay, Google Wallet, Samsung Pay, PayPal y AliPay. La mayoría de las carteras electrónicas intentan distinguirse de la competencia con distintos métodos. Por ejemplo, la Google Wallet te permite añadir fondos desde tu móvil (como si fuera una especie de e-cash). De este modo, puedes utilizar este efectivo en cualquier negocio que acepte Google Pay. Apple, por otro lado, se asoció estratégicamente con Goldman Sachs para emitir tarjetas de crédito Apple y expandir sus servicios ApplePay.
Ventajas e inconvenientes de las e-wallets
Una de las ventajas más significativas de las carteras digitales es que usar una limita la cantidad de información financiera y personal que necesitas llevar encima. Si coloca todo en su billetera digital, ya no necesita llevar tarjetas físicas o una cartera: no hay posibilidad de que una tarjeta se caiga o deje su tarjeta en la ranura del cajero automático. Además, no puede perder toda su cartera.
Las e-wallets no requieren una cuenta bancaria en un banco con una sucursal física. En su lugar, puede colocar sus fondos en un banco online, lo que permite a las comunidades no bancarizadas y subbancarizadas acceso a servicios financieros, propiciando una inclusión financiera más amplia.
La seguridad puede convertirse en un problema si usa una cartera digital de un proveedor que no ha sido examinado o no tiene una reputación establecida. Si tu teléfono no está protegido con contraseña o te lo hackean, corres el riesgo de darle a otra persona acceso a sus finanzas si pierde su teléfono. Además, puede haber negocios locales en los que prefieras comprar que aún no tengan un punto de venta que acepte esta tecnología.