El Valencia CF de Peter Lim negocia con Goldman Sachs (NYSE:GS) la restructuración de su deuda. Después de haber cerrado un préstamo de 121 millones EUR, ahora negocian uno de máximo 325 millones EUR, y a ser posible entre 20 y 25 años.
Las horas bajas de un club histórico: la era Lim del Valencia CF
La era de Peter Lim en el Valencia CF comenzó en 2014, cuando el empresario singapurense adquirió la mayoría de las acciones del club con la promesa de solucionar los problemas financieros y devolver al equipo a la élite del fútbol europeo. Su llegada generó expectativas y esperanza entre los aficionados, especialmente tras años de inestabilidad económica y deportiva. Sin embargo, su gestión ha estado marcada por numerosas polémicas y altibajos.
En sus inicios, la etapa de Lim parecía prometedora. Bajo la dirección del entrenador Nuno Espírito Santo, el Valencia logró clasificarse para la Champions League en la temporada 2014-2015, devolviendo la ilusión a la afición. Lim mostró un enfoque ambicioso, reforzando la plantilla con jugadores gestionados por el agente Jorge Mendes, un socio cercano. Sin embargo, con el tiempo, esta relación comenzó a generar críticas, ya que muchos fichajes llegaron a precios elevados y su rendimiento no siempre justificó la inversión.
Tras el fugaz éxito… Los problemas
El club empezó a mostrar una preocupante falta de estabilidad deportiva. En pocos años, el Valencia experimentó una alta rotación de entrenadores, con más de diez técnicos en menos de una década. Las decisiones estratégicas, tomadas desde Singapur por Lim y su entorno, se percibieron como alejadas de la realidad del club y de la ciudad, lo que generó descontento entre los aficionados.
A pesar de todo, en 2019, el Valencia logró un éxito significativo al conquistar la Copa del Rey, tras vencer al FC Barcelona de Messi en la final. Este logro, bajo la dirección de Marcelino García Toral, fue un momento de respiro para el club. Sin embargo, los conflictos internos no tardaron en resurgir. Marcelino y el director deportivo, Mateu Alemany, ambos figuras clave en ese éxito, fueron despedidos poco después debido a diferencias con Lim, lo que marcó el inicio de un declive deportivo.
Viudas de Marcelino… Contra Peter Lim
La venta de jugadores emblemáticos, como Dani Parejo, Rodrigo Moreno y Ferran Torres, sin una estrategia clara de renovación, acentuó el malestar de los aficionados. Paralelamente, los problemas económicos del club se agravaron, especialmente durante la pandemia, y proyectos importantes como el Nuevo Mestalla quedaron paralizados, simbolizando las promesas incumplidas de la gestión de Lim.
En los últimos años, el Valencia ha luchado por mantenerse competitivo sin que el propietario deje apenas margen económico mientras su relación con los hinchas se ha deteriorado. Protestas masivas, bajo lemas como «Lim Go Home», reflejan el descontento generalizado con una gestión que muchos consideran como una de las más conflictivas y perjudiciales en la historia del club. La era de Peter Lim, que empezó con esperanza, se ha convertido en una etapa marcada por inestabilidad, conflicto y desilusión para el Valencia CF y su afición. En la actualidad, el Valencia CF vuelve a estar una temporada más en puestos de descenso.
La restructuración de la deuda… Y una posible futura venta
El Valencia CF trabaja con Goldman Sachs para cerrar un nuevo préstamo de hasta 325 millones de euros, como segunda financiación tras un primer crédito de 121 millones en el que el banco actuó como intermediario. Este préstamo estará garantizado por el valor hipotecario del Nuevo Mestalla y los ingresos que genere (abonados, naming, ticketing, etc.), con un plazo de devolución estimado entre 20 y 25 años.
Los fondos se destinarán no solo a la construcción del estadio, sino también a devolver un préstamo puente de 65 millones, cubrir pagos relacionados con el pabellón municipal en Benicalap, los intereses del préstamo anterior y otros gastos asociados, aunque el tipo de interés aún no está definido.
Mayor deuda pero sólo un prestamista
El Valencia CF ha eliminado una quita bancaria de 61 millones de euros al resolver sus préstamos con CaixaBank y ha liberado las cargas hipotecarias de la parcela del viejo Mestalla, lista para su venta y valorada en más de 100 millones de euros. Actualmente, el club opera con un préstamo de 121 millones gestionado por fondos de pensiones norteamericanos, con un interés fijo del 6,53% y pagos del principal a partir de 2027. Las previsiones del club apuntan a una deuda bancaria anual de entre 30 y 31 millones cuando el Nuevo Mestalla esté operativo, frente a los 39,8 millones abonados en el ejercicio 23/24.