No se puede decir que Gamesa presente un comportamiento lateral a lo largo del presente ejercicio 2.015, pues el año se puede dividir, hasta la fecha, en dos tramos muy bien diferenciados. El primero de ellos se trata de un impulso alcista desde principios de año, una vez el precio rebotó desde la base de la tendencia alcista de largo plazo, hasta el pasado mes de JUL15 en el la cotización registró su máximo anual en los 16,74€ por acción. A partir de dicho máximo anual, el tramo correctivo que le ha llevado a perder un -34,83% de su valor en Bolsa.
Gamesa (GAM.MC) en gráfico semanal con Estocástico (ventana central superior), MACD (ventana central inferior) y volumen de negociación
Fuente: Visual Chart y elaboración propia.
Nos centramos por un momento en el tramo correctivo que parte de los máximos anuales situados en los 16,74€ por acción que es el verdaderamente importante a corto plazo, ya que, lejos de considerarlo como una amenaza, debemos considerar el rebote bajista como una oportunidad de compra basada en los siguientes argumentos; (1) las caídas registran una pendiente muy inclinada, algo que podemos catalogar como natural si atendemos a la pendiente igualmente pronunciada de la primera parte del año, en definitiva, la corrección en profundidad viene a normalizar la valoración de la compañía en Bolsa, (2) dicha corrección permite descomprimir por completo las lecturas de elevada y constante sobrecompra acumulada en los osciladores Estocástico y MACD, (3) las caídas no han puesto en jaque en ningún momento la base de la tendencia alcista de largo plazo, lo que si hubiera supuesto un potencial cambio de tendencia a medio plazo, (4) el rebote bajista no se registra con un aumento del volumen de negociación, más bien, todo lo contrario, el volumen cae por lo que las ventas no han entrado en fase de pánico, lo que le ha permitido mantener los primeros niveles de potencial soporte correspondiente al 38,2% del retroceso de Fibonacci del último ciclo alcista que parte de los 1,59€ por acción y, por último, (5) la media móvil de largo plazo, como indicador tendencial que es, sigue dibujando una clara y resistencia evolución positiva.
Aportamos cinco argumentos objetivos del precio para considerar que las caídas actuales son una clara oportunidad de compra, argumentos que también encuentran apoyo en los cruces alcistas que se producen en el Estocástico desde zona de sobreventa, siendo en las últimas ocasiones claras oportunidades de compra aprovechando niveles de potencial soporte, tal y como sucede en la actualidad, pero como todo puede cambiar en cuestión de segundos en Bolsa, debemos plantearnos igualmente los niveles a los que la cotización comienza a plantear serias dudas ante la viabilidad de las compras.
El primero de ellos parece obvio, pues si al más estricto corto plazo registramos un nuevo mínimo por debajo del 31,8% de Fibonacci que ha permitido dar freno al tramo correctivo de corto plazo, la cotización estaría habilitada para dilatar su movimiento hasta los 9,86€ por acción correspondientes a los máximos alcanzados el pasado año 2.014, a su vez, la base de la tendencia alcista de largo plazo tiene mucho que decir, ya que permitió el apoyo y su posterior reestructuración al alza a principios de año. Más abajo, encontramos los soportes comprendidos entre los 7,26-7,06€ por acción, soportes que funcionan como aproximación al 61,8% del retroceso de Fibonacci del último tramo alcista de largo plazo que parte de los 1,59€ por acción y cuya perforación, sería la confirmación de un cambio de tendencia bajista, aunque, dada la cercanía del nivel de referencia situado en los 6,5€ por acción, éste debería ser el verdadero punto de inflexión a largo plazo. Como vemos, el margen de caída es muy amplio gracias a la gran fortaleza alcista con la que cotiza Gamesa a día de hoy.