La compañía Grifols cotiza bajo una tendencia alcista clara desde el pasado año 2.011, tendencia que le permite cotizar muy próximo a los máximos históricos comprendidos entre los 42,54-41,24€ por acción.
Grifols (GRF.MC) en gráfico semanal con Estocástico (ventana central superior), MACD (ventana central inferior) y volumen de negociación
Fuente: Visual Chart y elaboración propia.
Las pronunciadas caídas de las últimas sesiones empuja a la cotización del activo bajo estudio a las inmediaciones de los 35€ por acción, nivel que coincide con el 50% del retroceso de Fibonacci que se desarrolla a partir de los 27,48€ por acción, base del último impulso alcista de corto plazo. Los 35€ por acción funcionan igualmente como aproximación a la media móvil de 52 semanas o de largo plazo que funciona como soporte y que, además, presenta una pendiente positiva pese a su aplanamiento a lo largo de los últimos meses.
La proximidad de la base de la tendencia alcista de largo plazo sugiere que la cotización actual se encuentra en un momento muy significativo, puesto que la perforación de la misma habilitaría un contundente tramo bajista con un objetivo primario en los 27,48€ por acción, último mínimo significativo y cota desde la que se estableció el último rebote al alza tras una formación de giro en forma de Hombro-Cabeza-Hombro invertido (HCHi)
El volumen de negociación se encuentra en clara fase de estancamiento mientras el precio se encuentra incapaz de superar máximos relativos previos con decisión. Mientras el precio mantenga la cotización por encima de la tendencia alcista de largo plazo, no habrá motivo para la preocupación, no obstante, en caso contrario podría comenzar a aportar señales de agotamiento aunque es el escenario secundario en estos momentos.
El objetivo al más estricto corto plazo es mantener y consolidar por encima de los 35€ por acción y alejar los fantasmas de un agotamiento comprador, hecho que permitiría superar sin demasiadas dificultades el hueco bajista situado en los 36,80€ por acción.