Tesla (TSLA) se hunde en bolsa tras incumplir su objetivo de ventas y las previsiones de los analistas. Las acciones del fabricante de coches eléctricos fundado por Elon Musk retroceden en la primera sesión del año pese al récord de entregas de 2022.
El hundimiento
Los inversores están una vez más decepcionados con Tesla. Pese a que la compañía ha batido su record de ventas el pasado 2022, se ha quedado lejos tanto de sus objetivos como de las previsiones de los principales analistas. Tras un terrible año en el que Tesla ha perdido hasta dos tercios de su valor y ha destronado a Musk como hombre más rico del mundo, 2023 lo ha iniciado con caídas de hasta el 13%.
Causas de la caída en bolsa
En el informe oficial de la empresa de su cuarto trimestre han dado cuenta de un aumento interanual del 40% de su producción, pero no llega ni de lejos a sus perspectivas, que eran del 50%. Pero las ventas han sido inferiores también a los 420.000 coches que esperaban los analistas para el cuarto trimestre, según la media de previsiones recopilada por Bloomberg.
Además, la producción de coches ha crecido en mayor medida que su capacidad de venta, lo que ha agrandado la diferencia entre ambas. La empresa se ha comprometido a reducir esa distancia, y presentará los resultados definitivos a final de mes. Entre las causas de su marcada contracción en las ventas se han señalado tanto la inflación como la creciente competencia.
Para más inri, la mayoría de los modelos de Tesla no se benefician de las nuevas ayudas al coche eléctrico puestas en marcha por la Ley de Reducción de la Inflación aprobada el año pasado por Estados Unidos, bien porque son demasiado caros o porque sus baterías no cumplen las exigencias de producción nacional exigidas por la norma. Pese a que Tesla ha dado descuentos de hasta 6,5K USD, no han paliado el descenso de las ventas.
El factor Twitter
Cabe destacar la influencia que ha podido tener el papel público de Musk y su pertinaz cruzada por apropiarse de Twitter. En este sentido, se han señalado tres motivos por los que esta compra ha podido afectar a tesla:
- La venta de acciones de Musk para poder acometer la compra.
- La asunción de la dirección de la Red Social, todo y que ya ha anunciado su reemplazo, lo que le ha distraído de los asuntos de Tesla.
- La dirección de su perfil público, que ha sido muy divisivo, provocando la antipatía de potenciales clientes con sus polémicas decisiones.
Además de los despidos masivos y otras decisiones polémicas, Musk se ha abrazado al Partido Republicano (para el que ha pedido el voto), ha atacado a los demócratas y ha readmitido a perfiles conservadores (algunos, extremistas) en su red, empezando por el expresidente, Donald Trump. Pero mientras Trump denigra en sus mítines los coches eléctricos y trata de trasladar a sus bases que son una estupidez, Musk puede estar provocando las iras de los progresistas, que resultan ser los mayores clientes de Tesla.