Abertis (ABE.MC) en gráfico semanal con MACD (ventana central) y volumen de negociación
Fuente: Visual Chart y elaboración propia.
La curva de precios de Abertis se encuentra en un momento verdaderamente interesante, un punto de inflexión que puede traer un movimiento violento al alza o a la baja en función de cómo resuelva la situación.
Nos referimos concretamente a la resolución, o no, al alza del límite superior del rango o canal bajista de largo plazo iniciado a partir de los 16,49€ por acción. Dicha zona de resistencia funciona a su vez como aproximación a la media móvil de largo plazo -ver MMS52- que puede adherirse como potencial freno a los avances de corto plazo.
El ataque no es baladí, pues nace desde una zona de soporte significativo como son los 12,29€, y que se apoyaba en un principio en la necesidad de normalizar lecturas de extraordinaria sobreventa acumulada por parte del oscilador MACD en escala semana. Dicho oscilador, muy próximo a cruzar al alza su zona neutral, podría funcionar como confirmación si el precio consigue superar la parte alta del rango decreciente citado anteriormente, pues obtendríamos una conjugación de superación de resistencias relevantes y señales de compra por parte de los osciladores.
De producirse dicho escenario, la vista a los máximos relativos previos de los 15,23€ por acción se produciría de inmediato respondiendo al violento movimiento que esperamos se registre próximamente. Por el contrario, una pérdida de momento notable en la serie de precios, esto es, una incapacidad de cerrar por encima de las resistencias mencionadas y un oscilador MACD girándose a la baja sin alcanzar su zona neutral, podría devolvernos a la base del movimiento en torno a los 12,29€ por acción.
En conclusión, desde una perspectiva de precios, el escenario principal es de una continuidad de la senda alcista de fondo con un ataque a los 15,23€ sin descartar ver los 16,49€ por acción. El elemento de mayor incertidumbre de cara a este potencial escenario alcista reside en el retroceso por parte del volumen de contratación que no termina de funcionar como punto de apoyo a los avances de muy corto plazo. Si la cotización es capaz de resolver este desequilibrio, la compañía superará los máximos del año 2015 sin mayor problema.